MIELOMA MÚLTIPLE: EPIDEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA

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El mieloma múltiple es una neoplasia maligna hematológica caracterizada por células plasmáticas clonales anormales en la médula ósea, con potencial de crecimiento descontrolado que causa lesiones óseas destructivas, lesión renal, anemia e hipercalcemia. La mediana de edad de aparición del mieloma múltiple es de 69 años y aproximadamente el 63% de los pacientes diagnosticados con mieloma múltiple tienen más de 65 años. Aproximadamente 100.000 muertes por mieloma múltiple ocurren cada año en todo el mundo. Esta revisión resume la evidencia actual con respecto a la epidemiología, la presentación clínica, el diagnóstico y el tratamiento del mieloma múltiple.

Epidemiologia

Mieloma Múltiple es más frecuente en personas mayores de 65 años en países industrializados como Australia, América del Norte y Europa occidental. Los datos del año 2017 del programa Surveillance, Epidemiology, y el programa End Results en los EE. UU, documentan un aumento de la incidencia con la edad, de 8,2 por 100.000 personas de 50 a 54 años, hasta 50,6 por 100.000 personas de 80 a 84 años. 

La causa del Mieloma Múltiple sigue sin estar clara y los factores de riesgo incluyen el sexo masculino, ocupación como bombero, obesidad, exposición a dioxinas/ químicos – agentes en la naranja. En EE. UU. la incidencia es mayor en las personas negras (14 por 100.000 personas) en comparación con las personas blancas (6,1 por 100.000 personas).

Fisiopatología

Las células plasmáticas clonales que causan el mieloma múltiple se derivan de las células B del centro posgerminal. En un individuo sano, después de la exposición al antígeno (p. ej., infecciones virales o bacterianas), las células B vírgenes, proliferan mal y posteriormente experimentan una hipermutación somática en las secuencias de las IgH e IgLVDJ. Este proceso produce células plasmáticas de larga duración (un subconjunto de células plasmáticas que proporcionan una producción sostenida y duradera de anticuerpos) que residen en la médula ósea y son un componente importante de la inmunidad humoral. El desarrollo de una población de células plasmáticas clonales anormales imita estos procesos biológicos normales, pero da como resultado cantidades excesivas de inmunoglobulina.

En casi todos los pacientes, el mieloma múltiple comienza como gammapatía monoclonal de significado indeterminado (MGUS), una discrasia de células plasmáticas clonales presente en el 3 % al 5 % de las personas mayores de 65 años. (Tabla 1) y en el 10% de los mayores de 80 años. La MGUS está asociada con la progresión a mieloma múltiple activo (sintomático), en una tasa aproximadamente de 1 % a 2 % por año, con un riesgo de progresión a mieloma múltiple a los 20 años de aproximadamente 18 %. 

El mieloma múltiple latente (SMM) es un trastorno de células plasmáticas más avanzado, con 4.100 pacientes diagnosticados anualmente en los EE. UU. Aproximadamente el 10% de los pacientes con SMM progresan a mieloma múltiple cada año. Hasta hace poco, la atención estándar para el manejo de SMM ha sido monitorear cada 3 a 6 meses los niveles de hemoglobina, creatinina sérica, calcio sérico y cadenas ligeras libres en suero; electroforesis de proteínas en suero y orina con inmunofijación; e imágenes esqueléticas de todo el cuerpo, hasta que se identifiquen las complicaciones de la enfermedad. Se debe considerar el tratamiento con lenalidomida para pacientes con SMM que tienen un mayor riesgo de progresión a mieloma múltiple sintomático, para retrasar o evitar el desarrollo de complicaciones del mieloma múltiple.

En 2013, se informó el primer ensayo aleatorizado de tratamiento para pacientes con SMM.  Este ensayo asignó al azar a 119 participantes a lenalidomida + dexametasona versus observación. En una mediana de seguimiento de 40 meses, 23% (13/57) en el grupo de tratamiento desarrollaron mieloma múltiple, frente a 76% (47/62) en el grupo de observación. Durante el período de estudio especificado, 7% (4/57) pacientes en el grupo de tratamiento fallecieron vs 21% (13/62) en el grupo de observación. En una mediana de seguimiento de 40 meses, el cociente de riesgos instantáneos (CRI) para desarrollar mieloma múltiple con tratamiento fue de 0,18 (IC del 95 %, 0,09 a 0,32; PAGS< .001). En una mediana de seguimiento de 40 meses, el cociente de riesgos instantáneos (CRI) para desarrollar mieloma múltiple con tratamiento fue de 0,18 (IC del 95 %, 0,09 a 0,32; PAGS< .001). En comparación con la observación, la supervivencia a los 3 años fue mejor en el grupo que recibió lenalidomida + dexametasona en un 69% (HR para muerte, 0,31 [IC 95 %, 0,10-0,91]; PAGS= 0.03). 

Un segundo ensayo clínico aleatorizó a 182 pacientes con SMM de alto riesgo a placebo o lenalidomida, continuó hasta que se produjo progresión o intolerancia a la terapia.A los 3 años de seguimiento, 8 pacientes en el grupo de tratamiento de 90 pacientes habían progresado a mieloma múltiple en comparación con 31 pacientes en el grupo de observación de 92 pacientes. La mortalidad general fue baja en ambos grupos durante el período de estudio de 36 meses; por lo tanto, no se demostró una diferencia estadísticamente significativa en la supervivencia. Dos pacientes fallecieron en el grupo de tratamiento y 4 pacientes en el grupo de observación.

Bibliografía:

Cowan A. Diagnosis and Management of Multiple Myeloma A Review JAMA. 2022; 327(5): 464-477. doi:10.1001/jama.2022.0003

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